Cuando se tiene hígado graso o esteatosis hepática, es importante realizar cambios en los hábitos alimentarios, ya que es una de las formas de tratar y mejorar los síntomas que produce esta enfermedad como lo es la pérdida de apetito, dolor abdominal del lado derecho del abdomen y barriga hinchada.
El hígado graso es producto de malos hábitos alimentarios, asociados con un aumento de peso y de enfermedades asociadas a la obesidad como prediabetes, diabetes, colesterol alto, triglicéridos altos e hipertensión. Con la dieta el objetivo que se busca es eliminar la grasa acumulada a nivel abdominal y en el hígado progresivamente.
Dieta para hígado graso
La dieta para el hígado graso no tiene como objetivo curar la enfermedad, pero si evitar que empeore y una de las recomendaciones principales es disminuir de peso (en caso tenga exceso) a través de la realización de actividad física regular y de una alimentación equilibrada, cuyos alimentos deben prepararse de forma sencilla sin el uso de condimentos y preferiblemente a la plancha, al vapor o al horno.
Por lo que los alimentos que son permitidos y los que deben evitarse son:
Alimentos permitidos
Consumir de 4 a 5 porciones entre frutas y vegetales al día como calabacín, berenjena, lechuga, tomate, cebolla, zanahoria, manzana, pera, durazno, papaya, fresas, moras, frambuesas, naranja, limón, ciruelas, entre otros.
Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibras diariamente como arroz integral, pan integral, pasta integral.
Huevo y carnes blancas bajas en grasa tipo pollo, pavo, y pescados.
Lácteos y derivados lácteos descremados, quesos blancos.
Aceite de oliva crudo con las ensaladas (máximo 1 cucharadita al día).
Además de esto, se debe aumentar el consumo de agua entre las comidas, consumiendo un total al día de 2 L, en caso que no beba mucha agua puede adicionarle limón para darle sabor, debido a que es rico en vitamina C y antioxidantes que ayudan a desintoxicar el hígado, pudiendo agregarlo también para aderezar las ensaladas.
Alimentos que no deben consumirse
Se deben evitar alimentos ricos en grasa como:
Queso amarillo, queso crema, requesón, chocolate, galletas de mantequilla, productos de pastelería en general, embutidos (salchichas, mortadela, tocineta, chistorras, jamón), mayonesa, mantequilla, margarina, manteca, salsas, pizzas, hamburguesas, perro calientes, burritos con salsas, tacos con salsas;
Azúcar de mesa o alimentos que lo contengan como tortas, galletas, ponquecitos, jugos pasteurizados, refrescos, Bebidas alcohólicas. En caso de dolor abdominal se deben evitar los alimentos que producen gases.
Si se siguen correctamente estas recomendaciones, será posible ir eliminando la grasa acumulada a nivel abdominal y del interior del hígado en aproximadamente 2 meses, sin embargo, es importante para obtener mejores resultados, realizar algún tipo de actividad física regular tipo caminata, corrida o bicicleta por lo menos 3 veces por semana durante 60 minutos.
